En España, los espectadores están enganchados a la ficción histórica. Para muestra, los excelentes datos de Los pilares de la Tierra, su estreno desbordó todas las previsiones, y congregó, en el primer capítulo, a más de cinco millones de espectadores, y alcanzó un 31,1% de cuota de pantalla en «prime time». Ha sido el comienzo más visto de una serie extranjera. Según la cadena, la ficción ha sido también la emisión no deportiva más vista en la historia de Cuatro, el último capítulo emitido el martes fue seguido por más de cuatro millones de espectadores y obtuvo una cuota del 20,8%, a pesar de coincidir parcialmente con el Escocia- España (Tele 5). La superproducción basada en la novela superventas de Ken Follett sobre la turbulenta Inglaterra del siglo XII se ha convertido en el programa más visto en Cuatro, con una audiencia media de 4.150.000 espectadores.
Con su octavo episodio, la gran superproducción acabó tras habernos sumergido en una historia épica con un nexo de común que sobrepasa al tiempo: una majestuosa catedral en Kingsbridge.
En el último episodio, ocho años más tarde en Kingsbridge, Remigius ya no es Prior, los monjes le han retirado su confianza y Phillip vuelve a estar a cargo del priorato y se reanuda la construcción de la Catedral. La dedicación de Jack a la catedral mina su relación con Aliena que además se resiente debido a que no se pueden casar, ya que Alfred no consiente en la anulación de su matrimonio con la chica.
Richard, el hermano de Aliena ha vuelto de Las Cruzadas donde fue a luchar contra los infieles en nombre del Rey Esteban y reclama una vez más el Condado de Shiring. Pero el Cardenal Waleran ha regresado de Roma y sigue teniendo influencia sobre el Rey Esteban. Richard tendrá que luchar para arrebatar el castillo de Shiring a William Hamleigh y la joven esposa del maléfico personaje jugará un papel decisivo.
Con su octavo episodio, la gran superproducción acabó tras habernos sumergido en una historia épica con un nexo de común que sobrepasa al tiempo: una majestuosa catedral en Kingsbridge.
En el último episodio, ocho años más tarde en Kingsbridge, Remigius ya no es Prior, los monjes le han retirado su confianza y Phillip vuelve a estar a cargo del priorato y se reanuda la construcción de la Catedral. La dedicación de Jack a la catedral mina su relación con Aliena que además se resiente debido a que no se pueden casar, ya que Alfred no consiente en la anulación de su matrimonio con la chica.
Richard, el hermano de Aliena ha vuelto de Las Cruzadas donde fue a luchar contra los infieles en nombre del Rey Esteban y reclama una vez más el Condado de Shiring. Pero el Cardenal Waleran ha regresado de Roma y sigue teniendo influencia sobre el Rey Esteban. Richard tendrá que luchar para arrebatar el castillo de Shiring a William Hamleigh y la joven esposa del maléfico personaje jugará un papel decisivo.
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